Así como debemos cuidar nuestra piel de la exposición a los rayos del sol, debemos hacer lo mismo con nuestros ojos. Estudios han demostrado que los rayos UVA y UVB pueden causar enfermedades como:
- Terigio: Crecimiento anormal de la conjuntiva sobre la córnea, se forma un «tela» sobre el ojo.
- Pingüecula: Carnosidad que se forma sobre la córnea y que puede inflamarse, dando lugar a la Pingüeculitis.
- Catarata: Proceso de opacificación del cristalino, lo que impide enfocart y ver imágenes nítidas.
- Degeneración macular: Enfermedad que afecta el centro de la retina y es la principal causante de la ceguera en personas mayores de sesenta años.
- Tumores oculares: Aparecen en los párpados, la retina, la conjuntiva, la coroides o la órbita.
La mejor opción para prevenir estas enfermedades es el uso de filtros como el UV400 o el amarillo-naranja. Las gafas de sol con este tipo de filtros se venden en ópticas y centros médicos especializados, por lo cual le recomendamos no comprar sus gafas de sol en las ventas callejeras.
Las gafas de sol deben utilizarse incluso en días nublados, ya que las nubes no bloquean al 100% los rayos UVA y UVB. Acostumbre a los niños a ciudar su salud visual desde temprana edad, para evitar enfermedades e incomodidades causadas por la exposición a los rayos solares.
Recuerde que a sus gafas de sol se les puede adaptar la fórmula que usted necesita, para que pueda utilizarlas para ver de lejos o para leer en exteriores.
Deja una respuesta